lunes, 19 de noviembre de 2012

El perfecto príncipe azul

¡Oh! Perfecto príncipe azul, cuanto tiempo sin verte, espera...
¿Por qué no puedo acariciarte la mejilla?
Otra vez... No...
Solo eres mi perfecto sueño, eres el príncipe de mis sueños...
¿Por qué solo un sueño? Quiero que seas real...
¡Ah! Es verdad fuiste verdad... Fuiste real, pero solo para decirme que conmigo te distraes, que conmigo eres otro, que conmigo te olvidas de todo y me besas y te pierdes con mi lengua. 
Me pierdo en tu mirada, e esas dulces caricias.
Me encanta, me encanta cuando me dices que te provoco, porque en realidad es porque tú deseas también mis besos. 
Y me estampas contra la dura pared y me besas, me besas con pasión y te llevo a la cama.
Te tiras encima mía y me empiezas a hacer tuya, y entonces desapareces, dejando una rosa roja en mi pecho, con la cual simbolizas un: volveré.
Pero hasta ahora solo apareces en mis sueños, y espero...
Espero a que vuelvas a ser real.
Y lo único que puedo alegar es un: Te amo mi príncipe perfecto.

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